GENOCIDIO EN GAZA
Publicado por Movimiento Apostólico Seglar el 9 de septiembre de 2014 +información-->
-volver a portada

“Amad a vuestros enemigos, amad a los que os aborrecen”

Estas reveladoras palabras de JESÚS, nos ponen en guardia frente a los sentimientos egocéntricos que en toda persona y colectividad pueden desarrollarse si no se vigilan y controlan. Efectivamente, los soberbios de corazón acaban apasionados, adictos a los ídolos que imperan en el mundo: la dominación y la riqueza. Los soberbios llegan hasta envenenar ideológicamente a colectividades y naciones. La soberbia que surge desde el interior del hombre ha estructurado antihumanos sistemas político-económicos como el estalinismo, el nazismo y el capitalismo.

Los dos primeros sistemas ya han sido vencidos por la bondad de los corazones que transforman al mundo de brutal en humano. Pero todavía queda el capitalismo que en su fase imperialista, las élites de las potencias siguen destruyendo pueblos, colonizando naciones y empobreciendo a las mayorías populares.

Una de estas nefastas ideologías concretadas en el Estado de Israel es el sionismo, que en el fondo es similar al nazismo. Así como es vergonzoso para los ciudadanos norteamericanos la existencia del imperialismo, para los buenos israelitas es una tragedia que haya compatriotas capaces de establecer un sistema político racista como el sionismo, pues las élites dirigentes de Israel están haciendo algo similar con los palestinos en Gaza, que los nazis alemanes hicieron con los judíos en el “gueto” de Varsovia.

Gaza de los palestinos, la ha convertido la endiosada clase dirigente de Israel con el apoyo incondicional del Imperio norteamericano y la colaboración de la Unión Europea, en algo parecido a un apartheid sudafricano contra negros, a un gueto alemán contra judíos y gitanos, a una cárcel racista a cielo abierto.

Los palestinos que residen en Gaza, están atrapados, rodeados por los ejércitos israelíes, desde tierra, mar y aire. Apenas el sionismo permite que usen el agua, tampoco que entren medicinas, alimentos, vestidos, material escolar, o instrumentos científicos y culturales. Los 1.7 millones de palestinos en los 360 km cuadrados de la Franja de Gaza, viven encarcelados, privados de libertad, porque así lo han decidido los sionistas con el apoyo de las élites norteamericanas. A los palestinos de Cisjordania se les permite un escaso bienestar si permanecen sumisos a la dominación sionista. Pero a los cerca del 1.2 millón de palestinos expulsados se les impide regresar a su patria y miles están en cárceles israelíes.

Los niños palestinos son sistemáticamente heridos, torturados y usados como escudos humanos por Israel. Anualmente unos 700 jóvenes palestinos entre 12 y 17 años, son detenidos y maltratados constantemente (ONU).

Los palestinos son descendientes de los antiguos pobladores de esas tierras dominadas en el siglo I por el Imperio romano, mezcladas con sucesivas migraciones. A partir del final de la II Guerra Mundial, las fuerzas aliadas norteamericanas y europeas vencedoras de los nazis acordaron con los sionistas, hacer el Estado de Israel en la tierra de los palestinos (1948).

Las élites imperialistas norteamericanas con sus amigos sionistas han establecido impedir que los palestinos se unan, prosperen y constituyan un Estado. Por tanto, las organizaciones políticas Hamás en Gaza y Fatah en Cisjordania, desarmados y sin apoyo internacional, son impotentes para impedir las continuas masacres que sufren los palestinos.

Ya van muchas agresiones militares racistas contra los empobrecidos e indefensos palestinos de Gaza. En esta última, muy destructiva, que dura más de 20 días, el sexto ejércitos del mundo se ufana de haber asesinado a más de 1.600 y heridos alrededor de 8.200 niños mujeres, ancianos e indefensos palestinos; y la limpieza étnica continuará. Dice hipócritamente el presidente Obama: “Israel tiene derecho a defenderse”; querrá decir: Israel tiene poder impune de realizar genocidios contra los palestinos civiles indefensos.

¿Pretenden las élites de Israel, junto con el lobby judío y los dirigentes de Estados Unidos, con el apoyo de la Unión Europea, hacer desaparecer a los palestinos como pueblo?

¿Cuál es el camino para lograr una paz justa en donde puedan convivir israelitas y palestino? Evidentemente no es el odio, ni el desprecio, ni el racismo. Pues por ese camino siempre habrá vencedores y vencidos. La solución no está en destruir a Israel, como desean ciertas élites árabes; tampoco en destruir a los palestinos como pretende la clase dominante israelí; sino en la convivencia pacífica, respetuosa y solidaria entre ambos pueblos, ya sea en uno o en dos Estados. Los dirigentes israelitas son los ejecutores de las masacres contra los palestinos indefensos, pero así sirven al interés geopolítico de las élites imperialistas norteamericanas en el Medio Oriente.

La solución para musulmanes y occidentales, para palestinos e israelitas, está por caminos inspirados en el Evangelio de JESÚS: el amor a amigos y enemigos, en la autodeterminación de los pueblos, en la construcción de un mundo donde quepamos todos sin dominadores ni dominados. El conflicto de Israel contra Palestina, se puede resolver si las élites dominadoras del mundo favorecieran la aplicación del Derecho Internacional, respetuoso con las personas, las razas, los pueblos, las naciones y los Estados.

Pedro Serrano Garcia


sitio alojado en nodo50 creative commons creado con spip